Valledupar, abril 15 de 2025. Desde el año pasado la señora Enis Barriga, viene adelantando una lucha con la EPS Sanitas y la Clínica del Cesar, a raíz de problemas para acceder a la atención por parte de estas dos entidades.
Barriga relató el viacrucis que ha vivido junto a su esposo, Gustavo Adolfo Díaz, quien necesita una cirugía urgente relacionada con problemas renales. «Vengo desde el año pasado en una lucha con Sanitas y con la Clínica del Cesar», afirmó la mujer, señalando que su esposo ya fue sometido a dos intervenciones previas gracias a denuncias públicas que forzaron la acción de las entidades.
Sin embargo, desde enero de este año, cuando fue programada una tercera cirugía, la situación se encuentra estancada. “Estoy esperando desde enero la llamada de programación de cirugía”, explicó Barriga, quien denunció además que su esposo permanece con un catéter interno desde noviembre, sin que hasta la fecha se haya concretado el procedimiento para retirarlo.
La paciente asegura que la EPS Sanitas se desentiende del caso y responsabiliza a la Clínica del Cesar, su prestadora directa. A su vez, la Clínica del Cesar remite a UroMil, una entidad especializada que también se encuentra a la espera de autorizaciones. “Me tienen de UroMil a la Clínica del Cesar, de la Clínica a Sanitas, y así sucesivamente”, aseguró.
Pese a la gravedad del caso, Barriga indicó que aún no ha interpuesto una tutela. “Cada vez que voy a la clínica me dicen que me llaman el lunes, pero eso nunca ocurre”, explicó. Frente a la falta de respuesta, advirtió que está considerando tomar acciones legales: “Si entre hoy y mañana no me llaman, procedo con una tutela. Ya el estado de salud de mi esposo se ha deteriorado”.
Sobre la condición actual de Gustavo Adolfo, la señora Enis explicó que se encuentra en casa, pero con múltiples molestias. “Tiene un catéter interno desde noviembre, presenta orina con sangre, dolor de cabeza constante, molestias para dormir y el colon inflamado por tener un cuerpo extraño dentro”, detalló. El paciente, además, es edil del corregimiento de Los Corazones, lo que le impide ejercer plenamente sus funciones.
Barriga expresó también su frustración ante la falta de canales efectivos de interlocución con las autoridades de salud. “Fui a Sanitas a hablar con el coordinador médico y me dijeron que no tenía acceso a él. Tampoco he tenido contacto con la Secretaría de Salud municipal ni departamental”, lamentó.
Aunque ha intentado el acompañamiento de abogados, los avances siguen siendo mínimos. “La clínica me ha engañado. Hemos perdido demasiado tiempo”, concluyó Enis, quien además reiteró su agradecimiento al medio por permitirle visibilizar el caso.
Clínica del Cesar programa cirugía pendiente
Luego de la denuncia realizada por Enis Barriga sobre la demora en la atención médica a su esposo Gustavo Adolfo Díaz, la Clínica del Cesar confirmó que ya fue asignada la fecha para el procedimiento quirúrgico que estaba en espera desde febrero.
“El 21 de febrero fue valorado por la uróloga, quien solicitó el retiro del catéter y una nefrolitotomía retrógrada con láser”, explicó Lina Lima, gerente de la clínica, en conversación con este medio de comunicación.
Barriga había advertido que su esposo llevaba más de cinco meses con un catéter interno, situación que había empezado a afectar otros órganos. Tras la gestión interna, la gerente confirmó que la cirugía fue programada para el próximo 22 de abril. “Ya me están pidiendo los prequirúrgicos del paciente. Si la señora se acerca con todos los exámenes, tenemos la valoración preanestésica lista para enviarlos a Euro Médica”, puntualizó.
Lima aprovechó para recordar que, ante situaciones similares, los usuarios pueden acudir directamente al Servicio de Información y Atención al Paciente (SIAP). “Ahí tenemos una persona encargada que toma el caso y busca cómo solucionarlo”, afirmó. Aunque aclaró que algunas soluciones no dependen únicamente de la clínica, insistió en que el proceso sí se gestiona.
“Muchos procedimientos están tercerizados y eso implica esperar una agenda externa. Pero lo importante es que el usuario vea que hay un esfuerzo real para darle solución”, agregó.
La gerente también hizo un llamado a la comprensión frente a las demoras: “Un paciente enfermo no entiende de procesos administrativos. Él solo quiere que le resuelvan su problema, y eso es lo que tratamos de hacer”.