Un cuadro triste presencian por estos días pacientes y acompañantes que asisten al hospital Rosario Pumarejo de López. En la parte exterior de la central de urgencias del centro asistencial, se pueden apreciar a varias jóvenes recién paridas, quienes deben dormir allí, mientras que sus hijos son atendidos al interior del hospital.
Este fin de semana fueron cuatro mujeres, una de ellas una niña de apenas 13 años de edad, quienes luego de ser sometidas a la respectiva cesárea, fueron dadas de alta mientras que sus hijos permanecen hospitalizados por diversas razones.
Una de estas mujeres es Dilia Angélica Moreno Camargo, de 27 años de edad, quien viene del municipio de El Banco Magdalena. Ella fue sometida a una cesárea y después de 48 horas le dieron de alta al tiempo que su bebé sigue en UCI neonatal.
La joven mujer dijo que no teniendo para donde ir debió permanecer en compañía de su señora madre en la parte exterior de la central de urgencias, donde ya completan diez días durmiendo en los andenes o en incómodas sillas. “ Ya tengo la cesárea que se me está infectando” aseguró la joven madre.
Uno de los casos más tristes es el de una niña de 13 años de edad, quien proviene del municipio de Bosconia. Ella también en compañía de su mamá, se encuentran hace varios días durmiendo en los andenes o sillas ubicadas en la parte exterior del centro asistencial. Ambas mujeres pertenecen a la EPS Cajacopi.
Radio Guatapurí consultó con Duver Vargas, agente interventor del Rosario Pumarejo de López quien dijo que esta situación es complicada a raíz de que la hotelería hospitalaria es solo para el paciente y no para sus familiares. “ En este caso se está garantizando la atención médica al menor pero la mamita no tiene ningún criterio para ser hospitalizada” dijo el funcionario.
Ante el llamado de este medio de comunicación, Vargas a través de la oficina de trabajo social del centro asistencial, logró que una de las mujeres fuera trasladada a un hotel, no obstante la mujer dijo que solo le ofrecieron un día de hospedaje, al que no pudo asistir porque no tenía como pagar el transporte.
Milbia Armedo, quien acompaña a su hija que tuvo su bebé en el hospital, ha sido una de las personas que han colaborado a las mamás que se encuentran durmiendo en la parte exterior. Ella indicó que su hija, de 32 años, perteneciente a otra eps, fue sometida a una cesárea y sí ha recibido el trato como paciente junto a su bebé, por lo que no entiende el por qué estas otras mujeres que vienen de otros municipios, deben padecer por este trato.