Con el fin de dinamizar el desarrollo y la productividad del campo colombiano dentro del plan de desarrollo 2018- 2022, el gobierno ha impulsado la agricultura por contrato, una alternativa que pretende beneficiar al pequeño y mediano productor, asegurando de manera anticipada la venta de sus productos.
Este esquema consiste en pactar las condiciones de cultivo y venta con el comprador antes de que se inicie la producción, lo que aseguraría al productor a quien, y a qué precio venderá su cosecha, disminuyendo así la incertidumbre propia del sector.
Para el departamento del Cesar la agricultura por contrato representa una oportunidad importante, ya que este es un sector que genera el 30% de los ingresos del departamento, y está posicionado como el segundo departamento a nivel nacional en importancia en áreas sembradas.
“El departamento del Cesar tiene en esta alternativa, la oportunidad de reactivar el sector agrícola, ya que el territorio cuenta con tierras que presentan una alta vocación productiva y que, según estudios realizados por el IGAC en el año 2007, se encuentran subutilizadas con la ganadería. Casos como la producción de Algodón, debe volver a ser parte importante de la economía que jalona nuestra región” afirmó Liliana Morales, docente del programa de derecho de la Fundación Universitaria del Área Andina.
Según Fedepalmas, el cultivo de palma de aceite representa el 80% del PIB agrícola en el departamento, siendo el Cesar el segundo productor de palma de aceite del país con un área de 78.000 hectáreas de área sembrada, este producto al 2018 generó 27.291 empleos, siendo Oleoflores una de las empresas aliadas de este sector en el departamento del Cesar.
En el caso del cacao existen aproximadamente 7.260 hectáreas sembradas, y el Cesar es el séptimo productor de este producto en Colombia, siendo Casa Luker y la Nacional de Chocolates empresas que han puesto sus ojos en el departamento por el crecimiento acelerado de este producto.
Según la docente de Areandina, por las cualidades que ofrece el departamento del Cesar, la agricultura por contrato representa una gran oportunidad para que los productores puedan generar alianzas que aseguren sus ventas y poder tener así, una estabilidad productiva y económica.
“A través de cláusulas contractuales se puede proteger al agricultor en caso que se presenten perdidas de la producción por catástrofes naturales y/o debido al cambio climático, asumiendo dichos riesgos con el comprador a través de seguros especiales; la agroindustria también puede facilitar el acceso a insumos y asesoría técnica, lo cual está directamente relacionado con un aumento significativo de los rendimientos de la producción”, comentó la docente de Areandina.
Estudios realizados en otros países como Chile, son referente de cómo esta herramienta facilita a los productores no solo la comercialización de su producto en el mercado interno, sino, aumenta la tendencia a la producción y comercialización para el mercado externo.
“Es importante que como región aprovechemos este mecanismo que promueve el gobierno nacional para reactivar nuestro campo cesarense y desde el sector público, la empresa privada y la academia se apoye al pequeño y mediano productor en la adopción de la Agricultura por Contrato”, puntualizó Morales.
