La vereda El Toco, en el municipio de San Diego, Cesar, estaría viviendo nuevamente la violencia que años atrás los sacó de sus predios. Así lo temen los campesinos quienes la noche de este sábado sufrieron un atraco por parte de ocho personas que llegaron a la población y se identificaron como supuestos miembros del Clan del Golfo.
Los hechos se registraron específicamente en una finca que funciona como centro de acopio de los campesinos y dónde permanecían las máquinas y elementos que permiten a la población víctima recuperar la actividad agropecuaria en la zona.
«Al parecer a las 6:30 de la tarde llegaron 8 personas que se hicieron pasar por el Clan del Golfo, amarraron a los campesinos y se llevaron equipos de pivotes en dos camiones y cuatro motocicletas», afirmó el secretario de Gobierno, Eduardo Esquivel López.
Los elementos hurtados son dos bombas centrífugas marca Weg de color verde de 60 caballos de fuerza, celulares, dinero en efectivo y otros elementos, avaluados en cerca de 60 millones de pesos y los cuales hace cerca de cuatro meses los había entregado el Gobierno del Cesar, ente que rechazó el acto que revictimiza a esta población.
Según explicó Esquivel López, esta es la segunda vez que roban en ese lugar, la anterior fue en agosto del año pasado cuando se llevaron objetos personales.
El funcionario anunció la entrega de una recompensa de hasta $50 millones de pesos a quien entregue información que permita dar con el paradero de los responsables de estos hechos.
La zona fue militarizada y las autoridades investigan si hay nueva incidencia de los grupos armados en esta región que había recuperado la paz.