En un espacio cargado de simbolismo y conexión con las raíces, la Casa de Paso Dusakawi fue el escenario escogido para presentar una iniciativa sin precedentes en Valledupar: un proceso de formación ambiental liderado por integrantes de comunidades indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta, quienes compartirán su visión ancestral sobre el cuidado del agua.
Este proyecto hace parte del contrato 031 del anexo 13, suscrito entre Emdupar S.A. E.S.P. y el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga (amb). El acto de lanzamiento reunió al agente especial de Emdupar, José Luis Palomino López, al director del proyecto por parte del amb, así como a líderes indígenas y gestores comunitarios comprometidos con la preservación del medio ambiente.
La formación se desarrollará con una metodología pedagógica centrada en la cosmovisión indígena, particularmente de la etnia kankuama, quienes transmitirán a estudiantes y líderes comunitarios su conocimiento ancestral sobre la protección del agua, la conservación de los recursos naturales y la gobernanza ambiental.
“Queremos cuidar la cuenca que baña este territorio, por lo cual formamos a la población para que tenga sentido de pertenencia por el río Guatapurí, que es la vida de esta región”, expresó uno de los facilitadores indígenas durante la presentación del proyecto.
Educación para transformar la relación con el agua
La propuesta busca generar conciencia ambiental desde edades tempranas y fortalecer el liderazgo comunitario con una visión más integral del cuidado del recurso hídrico. Para ello, se han vinculado instituciones educativas como los colegios Leonidas Acuña, Milciades Cantillo, Consuelo Araujo Noguera, Comfacesar y San Joaquín, así como representantes de los barrios Alta Gracia, Los Mayales, Mayales Aeropuerto, Francisco de Paula, Altos de Comfacesar y San Joaquín.
Los facilitadores del proceso son miembros de la comunidad indígena con experiencia en educación ambiental, entre ellos Adriana Arias, Orfelina Carrillo, Carmen Clara Pacheco, Heidy Mindiola y Jorge Armando Rincones, quienes pertenecen a la fundación Fundam.
Este esfuerzo conjunto busca que tanto estudiantes como líderes sociales reconozcan la importancia del agua como elemento sagrado y asuman un rol activo en la defensa de los ecosistemas que abastecen la región.
