Aunque en Patinódromo de Valledupar no estuvo a reventar como tal vez se esperaba, y aunque a los empresarios que organizaron el concierto de seguro hoy las cuentas no le cuadran, el evento de Redimidos el pasado sábado en horas de la noche en Valledupar, cumplió su objetivo. Por espacio de tres horas seguidas, el rapero oriundo de Santo Domingo hizo vibrar al público asistente con sus canciones, las cuales tienen un mensaje central: La defensa de la fe en Jesucristo.

Y es que  Willy González Cruz no tiene de otra. A los 17 años sucumbió ante las drogas de las cuales logró salir en 1999 cuando se convirtió al cristianismo. Tal vez solo siendo así, radical, fuerte, se aleja de ese demonio que es la drogadicción, y se acerca a lo que él considera el único camino para lograr la salvación y la paz.

Redimido como se hace llamar artísticamente, es el segundo cantante góspel más buscando a través de la red social Youtube después de Jesús Adrián Romero. Pero su radicalismo es tan fuerte, que dentro de la misma iglesia cristiana es criticado a tal punto que su canción Ofensivo y Escandaloso, ha sido vetado en algunas estaciones musicales Gospel en Lationamérica. Él la tiene clara, y sabe que por es mejor estar en paz con Dios que tratar de complacer a los hombres para evitar sus críticas.

Era de esperarse que ese radicalismo espiritual en el que se mueve, lo lleve a manifestar posiciones que muchos no quisieran escuchar, como es la que asumió cuando Colombia se movilizó para rechazar la llamada ideología de género. Hoy dice, eso fue un triunfo de la sociedad en defensa de la familia.

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El mismo día que Redimido se presentó en Valledupar, durante el último concierto que realizará durante el 2016, en Oslo el presidente Juan Manuel Santos estaba recibiendo el premio Nobel de paz. Premio en el que el rapero no cree mucho. “ La paz en la que yo creo es la paz que sobre pasa todo entendimiento” dijo, al cuestionar abiertamente el Acuerdo de paz del gobierno nacional con la guerrilla de las Farc aunque no lo mencionó.

 Si algo dejó claro en Valledupar este cantante de 37 años, es que no tiene pelos en la lengua, ni siquiera para cuestionar la forma como muchos músicos han querido conquistar el mercado de la música vallenata incluyendo tímidamente un acordeón en sus canciones. Él dijo que planea grabar vallenato, rapear sobre una canción del folclor de Francisco el Hombre.

Por ahora está concentrado en el rap, música en la que cree, y la cual defiende como un vehículo que conduce a adorar a Jesucristo, pese a que muchos quieran hacer creer que la alabanza y la adoración es un género musical  aparte.

 

 

 

 

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