El hurto al carro de la Brink durante el pasado festival de la leyenda vallenata no pudo ser un hecho que pasara desapercibido, pese al sonido de los acordeones. Fue tan cinematográfico lo ocurrido, que todos los medios le pusieron la lupa. Varias cosas llamaron la atención de este atraco. Para mí, fue un hecho lleno de chambonerías. Primero, porque …