Valledupar, marzo 14 de 2025. El Cuerpo de Bomberos de Valledupar se enfrenta a serias dificultades económicas, particularmente en lo relacionado con el mantenimiento y la gestión del nuevo carro escalera, un equipo adquirido por la Gobernación del Cesar para mejorar la capacidad de respuesta ante emergencias. El comandante de los bomberos, Alexeis Pettit, explicó que este tipo de vehículos no solo requiere una inversión inicial significativa, sino también un alto costo anual de mantenimiento.
El comandante mencionó que «el carro escalera es un vehículo con una muy buena visión que tuvo la gobernación en adquirirlo», pero añadió que los costos asociados al mantenimiento y la póliza todo riesgo, que ascienden a 65 millones de pesos al año, resultan complicados para la administración local. El vehículo, que tiene un valor aproximado de 3,600 millones de pesos, debe someterse a mantenimiento especializado por la empresa que lo ensambló, lo que implica «mantenimientos preventivos de unos 15 millones de pesos», sin contar los gastos adicionales en caso de reparaciones mayores.
El comandante Pettit recalcó que, aunque «la gobernación ha sido receptiva», aún no se ha encontrado una solución definitiva para estos costos. El Cuerpo de Bomberos ha tenido que lidiar con un presupuesto anual que solo cubre parcialmente sus necesidades operativas. De los 4,700 millones de pesos solicitados para el funcionamiento de la institución, cerca del 50% se destina a nómina, dejando muy poco para otras necesidades básicas, como combustible y equipos de protección.
La Sobretasa Bomberil: Un recurso insuficiente
Y es que la situación económica del Cuerpo de Bomberos debería ser subsanada por la tasa bomberos, que es un porcentaje del impuesto predial que se destina al organismo de socorro, sin embargo se ha demostrado que estos recaudos resultan insuficientes para cubrir los gastos necesarios. Según el comandante, «el municipio recauda alrededor de 40 millones de pesos por impuesto predial, lo que no alcanza ni para cubrir el 50% del presupuesto que necesita el Cuerpo de Bomberos». Esta situación ha llevado a los bomberos a solicitar recursos adicionales tanto al municipio como a la gobernación, pero las respuestas han sido limitadas, y el apoyo de instituciones como CORPOCESAR ha sido prácticamente nulo.
Pettit explicó que, a pesar de la falta de recursos, «hemos tenido que mendigar» apoyo a diferentes entidades para poder operar adecuadamente. Además, advirtió que la falta de recursos también limita las inversiones en nuevos equipos y la renovación de los existentes, lo que pone en riesgo la capacidad de respuesta ante emergencias.
