Valledupar, febrero 13 de 2025. En el marco del Día Mundial de la Radio, Cacica Noticias tuvo la oportunidad de dialogar con dos grandes exponentes de la radio vallenata: Gustavo Cuello y Limedes Molina Urrego. Ambos con décadas de trayectoria, han sido testigos de los profundos cambios que ha sufrido este medio, siempre desde su pasión y entrega.
«Mi pasión siempre fue la radio, aunque luego incursioné en la prensa escrita y la televisión», comentó Cuello Díaz, quien comenzó su carrera como locutor en «La Voz del Cesar», y rápidamente se sumergió en el ambiente radial local. Recordó con cariño los primeros días de emisoras como Radio Valledupar y Radio Guatapurí, y cómo la tecnología fue revolucionando el sonido de las transmisiones. «El cambio fue fenomenal. Recuerdo cuando teníamos que esperar a que llegaran los periódicos y, en pocos años, ya podíamos leer los titulares en nuestros celulares», indicó Cuello.
Al preguntarle sobre lo mejor de su carrera en la radio, Gustavo Cuello destacó los programas de complacencia que hacía en Radio Guatapurí y el «Porrazo del Carnaval». Además, recordó cómo la radio jugaba un papel vital en la comunidad, validando hechos tan sencillos como los accidentes en la esquina de un barrio.
En cuanto al futuro de la radio, Cuello se mostró optimista, aunque reconoció la importancia de adaptarse a las nuevas tecnologías. «Hoy en día, la radio es más accesible gracias a los avances, pero debe seguir evolucionando», expresó.
A su turno el periodista Limedes Molina Urrego, también compartió su historia en la radio. Su camino comenzó en «Ondas de Macondo», una emisora local ya desaparecida. A través de su anécdota sobre su primer comercial de radio, grabado a los 12 años, Molina recordó su primera incursión en este medio. «Yo estaba enamorado de la radio desde pequeño, porque crecí escuchando los locutores. Mi hermana me llevó a grabar ese primer comercial, y ahí comenzó todo», contó el comunicador.
Al igual que Cuello, Molina Urrego reflexionó sobre la evolución del medio y la amenaza que representan las nuevas tecnologías. Sin embargo, destacó el valor de la radio, especialmente en las regiones, donde sigue siendo el faro de la comunidad. «La radio valida los hechos. Si no lo dice la radio, para la gente no ha ocurrido», comentó.
Molina Urrego también se mostró preocupado por cómo algunos medios no han logrado adaptarse a las nuevas tendencias, especialmente en el aspecto comercial y creativo. Aunque reconoció que el avance digital ha transformado la radio, se mostró convencido de que el medio tiene un largo camino por recorrer. «La radio se resiste a morir. A pesar de todo, sigue siendo importante, y los medios deben adaptarse a las nuevas realidades para mantenerse«, aseguró.
Un mensaje para las nuevas generaciones
Ambos periodistas coincidieron en la importancia de la preparación y el compromiso con la radio. Para Cuello, el futuro de la radio radica en el enfoque serio y disciplinado de los periodistas. Molina Urrego, por su parte, hizo un llamado a las nuevas generaciones de locutores: «Si van a hacer radio, háganlo en serio. La radio no es solo tener una voz bonita, también es investigar, escribir y, sobre todo, estar comprometido con el medio».
Para los veteranos de la radio, la clave es prepararse y ser conscientes de que la radio, aunque se haya transformado, sigue siendo un medio vigente. «El secreto es adaptarse y seguir aprendiendo», concluyó Limedes Molina Urrego.
Ambos periodistas, con su vasta experiencia, nos dejan una lección valiosa sobre la importancia de mantener vivo el legado de la radio, sin perder de vista las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías. La radio, aunque cambie, sigue siendo la voz que une a las comunidades.