En un esfuerzo por mejorar la conectividad rural y promover el desarrollo regional, la gobernadora Elvia Milena Sanjuan Dávila inauguró este miércoles 11 de septiembre 5,7 kilómetros de la vía que conecta Gimai con Minas de Iracal, en el municipio de Pueblo Bello. Esta obra es vista como un símbolo de unidad entre las comunidades indígenas, los campesinos y el gobierno, además de ser un impulso para sectores clave como la agricultura, educación, salud, seguridad y turismo.
La obra, ejecutada como parte del Plan de Infraestructura Vial del departamento del Cesar, mejora significativamente la movilidad en la zona rural, facilitando el transporte de productos agrícolas y el acceso a servicios básicos. La gobernadora subrayó el impacto de la inversión en infraestructuras de este tipo, afirmando: “Consolidar estos 5,7 kilómetros de vía en una comunidad tocada por la violencia, es una manera de materializar el deseo de hacer paz en el territorio”.
Este tramo vial no solo favorece el transporte de alimentos desde la «despensa agrícola» de la Sierra Nevada de Santa Marta, sino que también asegura un acceso más rápido a las escuelas para los niños, y permite que las emergencias de salud puedan ser atendidas de manera más eficiente. La gobernadora también resaltó cómo este tipo de obras contribuyen a mejorar la calidad de vida de los habitantes: “Una ambulancia irá a atender una emergencia de mejor forma, nuestros adultos mayores podrán llegar a la cabecera municipal a tomar del Estado esas bonificaciones que les han sido entregadas durante este tiempo”.
El alcalde de Pueblo Bello, Alfredo Bohórquez, expresó su satisfacción por el impacto de esta obra, no solo en términos de infraestructura, sino también en la cohesión social de la comunidad. “Más allá de solucionar esa problemática de movilidad hemos logrado, gobernadora, impactar también en la unidad de la comunidad, entre nuestros hermanos indígenas y campesinos que convivimos en esta zona”, señaló el mandatario local.
Una obra esperada por la comunidad
La construcción de este tramo vial ha sido largamente anhelada por los habitantes de las veredas y corregimientos de la zona. Eduardo De Ávila, residente de Minas de Iracal, agradeció a las autoridades por la obra, afirmando que: “Esta obra nos ha dado la oportunidad de empezar a ponernos de acuerdo entre las comunidades, habitantes en este territorio, como son nuestros hermanos indígenas y los campesinos”.
Por su parte, Saúl Mindiola, líder de la comunidad arhuaca, resaltó la importancia de la vía en la recuperación del territorio: “Minas de Iracal tiene una historia como un territorio devastado por la violencia, que llegó a ser un pueblo fantasma. Esta vía nos sentó a dialogar”.
Hacia los mil kilómetros de vías
Durante su discurso, la gobernadora Elvia Milena Sanjuan destacó el avance en el desarrollo de infraestructuras viales en el departamento del Cesar. Reiteró su compromiso de alcanzar los mil kilómetros de vías construidas antes de finalizar su periodo de gobierno, como parte del Plan Vial Departamental impulsado por el exgobernador Luis Alberto Monsalvo Gnecco. “Si Dios nos lo permite, durante este periodo alcanzaremos el milésimo kilómetro de vías en el Cesar, y eso es un logro que merece ser reconocido”, afirmó.
La inauguración de la vía Gimai – Minas de Iracal es un paso más hacia la consolidación de un Cesar más conectado y en paz, con un futuro prometedor para las comunidades que dependen de estas importantes infraestructuras.