Luego de varias reuniones realizadas en días anteriores con las diferentes entidades a nivel departamental para tratar el hacinamiento que hay en cárcel Judicial de Valledupar, guardianes de este centro de reclusión decidieron iniciar un plan tortuga y empezar a regirse al ‘Plan de Reglamento’ el cual consiste en no recibir a reclusos en calidad de sindicados puesto que no hay espacio para nadie más. Actualmente, el 80% de la población al interior de este centro de reclusión corresponde a los sindicados, aquellos que no han sido condenados.
La capacidad máxima para las instalaciones de este centro de reclusión son de 250 internos, sin embargo hay 1.378, lo que dificulta el trabajo de los 80 guardianes que brindan seguridad a estas personas que se encuentran allí recluidas; esto no es lo único que aqueja a este grupo de guardias y a los internos, se le suma el mal estado de las instalaciones y la falta de guardias en los turnos de la madrugada.
“Como medida para tratar de sobrellevar el hacinamiento está en proceso el traslado de 140 internos a diferentes cárceles de la región, 100 hombres y 40 mujeres. Nosotros no tenemos las condiciones optimas más trabajar, esto no es una caja de pollos donde meten y meten a tanta gente; necesitamos que la Dirección General del Inpec haga presencia en este establecimiento y se den cuenta que si hay hacinamiento, creo que hay indiferencia total y ni se han manifestado; los invito a que vengan en horas de la noche y hagan una revista de todo lo que se vive aquí”, manifestó el Dragoneante Óscar Urrego, director del sindicato de empleados unidos penitenciarios Seup.
La directora de la Cárcel Judicial, Enilda Vásquez Oñate, expresó una gran preocupación por toda la problemática que se vive al interior de este centro y en la permanente: nosotros no podemos albergar más internos sindicados, el Inpec nos obliga a recibir los condenados y los de detención domiciliaria más no a los sindicados, a estos son los únicos que recibiremos porque no tenemos a donde tener a más internos”.
Guardianes de la Cárcel Judicial denuncian condiciones infrahumanas en las que los internos deben estar, como es dormir de pie en los baños, también la falta de impermeabilización de los techos, lo que les preocupa debido a que en las temporadas de lluvias que se aproximan se verán más afectados.