Llegaron a la vereda Las Casitas hace más de dos meses con el fin de llevarle un poco de alegría a los habitantes de esa humilde población. Son una familia conformada por siete personas, que tienen un circo que recorre la Costa Atlántica y que llegaron al corregimiento en mención, cuando comenzó la cuarentena.
Arika Tafur, amiga de estas personas, dijo que al llover fuertemente sobre la región, todas sus cosas se les dañaron y deben dormir prácticamente a la intemperie.
A raíz de todo esto, esta familia decidió regresarse a la ciudad de Barranquilla donde residen, pero ha sido imposible por la misma cuarentena.
