Valledupar, mayo 21 de 2025. Este 21 de mayo se cumplen tres meses desde que un grupo armado, presuntamente del ELN, secuestró a Jenny Salazar Zabaleta, expersonera del municipio de Tamalameque. La mujer fue retenida por hombres armados en la Troncal de Oriente, cerca de Tamalameque, en la zona de Pailitas, y desde entonces permanece en un paradero desconocido.
Juan Carlos Salazar, hermano de Jenny, relató con profunda angustia el difícil momento que atraviesa la familia. “Aquí con el alma destrozada, con los corazones como una uva pasa, esperando la libertad de mi hermana que llegue nuevamente a nuestros hogares”, expresó.
La familia ha recibido un comunicado de la organización responsable del secuestro, que además exige una cifra exorbitante por la liberación: “Están pidiendo una suma exagerada de dinero, 15.000 millones de pesos, es decir, alrededor de 3.25 millones de dólares, una locura que ni siquiera todo el municipio podría reunir”, explicó Juan Carlos.
Respecto a la prueba de supervivencia, señaló que solo su madre tuvo acceso a un video donde pudo ver a Jenny, aunque no compartieron ese material con otros familiares. “Mi mamá dijo que la vio más delgada, ojerosa. Ella dice que estaba bien, pero que eso no era estar bien”, manifestó.
Ante esta difícil situación, la familia ha convocado una misa en la iglesia católica del municipio y una velatón desde los hogares de Tamalameque, buscando mantener la esperanza y la presión para lograr la pronta liberación de Jenny. “Queremos que esa luz sea el faro que lleve el camino de la libertad de mi hermanita”, afirmó Juan Carlos.
Finalmente, envió un mensaje a los secuestradores: “Por favor, sean más acordes a la realidad y liberen a mi hermana. Tenemos una familia desesperada, que la amamos muchísimo y la estamos esperando con los brazos abiertos”.
