Moscú, diciembre 9 de 2024. El Kremlin evitó confirmar los informes que apuntaban a que el expresidente sirio Bashar al Asad habría huido a Rusia, después de que varias agencias de noticias rusas informaran que, según fuentes gubernamentales, el mandatario y su familia habrían llegado a Moscú y recibido asilo por razones humanitarias.
«Sobre la ubicación del presidente al Asad, no tengo ninguna información para compartir«, comentó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ante los medios de comunicación. «Lo sucedido ha sorprendido al mundo entero, y nosotros no somos una excepción«, añadió.
En otro desarrollo, la embajada de Siria en Moscú izó este lunes la bandera de la oposición siria. Un periodista de la AFP observó cómo un grupo de hombres colocaba la emblemática bandera con tres estrellas rojas en el edificio diplomático, mientras comenzaban a caer algunos copos de nieve en la capital rusa.
Una fuente dentro de la embajada confirmó que «la embajada sigue abierta y funcionando con normalidad bajo la nueva bandera«, según informó la agencia de noticias pública rusa Tass. Este gesto simbólico se produjo tras la caída del régimen de al Asad, quien, según los reportes de agencias rusas, se habría trasladado junto a su familia a Moscú el día anterior.