Konya, septiembre 7 de 2025. La selección española firmó una de sus actuaciones más brillantes de los últimos años al derrotar a Turquía por un contundente 0-6 en las eliminatorias rumbo al Mundial 2026. Un triunfo que no solo consolida el liderato del Grupo E, sino que reafirma la confianza de un equipo que juega con autoridad, frescura y hambre de éxito.
Un inicio demoledor
El choque apenas había comenzado cuando Pedri adelantó a España con un disparo ajustado que silenció el estadio. Ese tanto tempranero marcó el tono del encuentro: posesión, verticalidad y una presión alta que ahogó a Turquía desde el primer minuto.
Merino, el hombre de la noche
La gran figura fue Mikel Merino, que se lució con un hat-trick de enorme calidad. Primero aprovechó un centro preciso para marcar de cabeza, luego sorprendió con un remate lejano imposible para el portero y finalmente cerró su triplete con una definición serena dentro del área. Su actuación quedará en la memoria como una de las más completas con la camiseta de la Roja.
Fiesta ofensiva
El festival no se detuvo ahí: Ferran Torres se unió a la fiesta con un gol de oportunismo tras una jugada colectiva, y Pedri, inspirado, completó su doblete en la segunda parte. España no solo marcó seis goles, también mostró solidez defensiva, sin conceder ocasiones claras a los locales.
Camino despejado al Mundial
Con esta victoria, España suma pleno de puntos en sus dos primeros compromisos de clasificación y se coloca en una posición inmejorable para asegurar su billete al Mundial. Más allá de los números, lo que ilusiona es la sensación de bloque: un equipo joven, ambicioso y con un estilo reconocible que recuerda a sus mejores épocas.