Cristian de Jesús Sánchez Ramírez, un obrero de 18 años, perdió a su bebé de 14 meses de edad en un terrible descuido la noche de este lunes festivo. En las instalaciones de Medicina Legal Valledupar, narró a los medios de comunicación los minutos que le costaron una pérdida irreparable.
“Todos nos descuidamos, no vimos pasar a la niña para la cocina. No había agua en ese momento, llenamos los potes para recoger el agua y la mamá fue quien la encontró en el balde”, dijo el joven padre de otros dos hijos.
Sentados viendo televisión, él y su compañera sentimental una joven de 16 años, ambos habitantes de la urbanización Hernando Marín, descuidaron unos minutos a una bebe que acababa de aprender a caminar.
“Fue cuestión de minutos, fue rápido. La perdimos de vista y no nos fijamos”, narró el padre de la menor cuyo fallecimiento se presentó al interior de la vivienda, ahogada en el balde para recoger agua, escases del líquido que experimentan la mayoría de los vallenatos, en especial las comunidades periféricas.
Inmediatamente hallaron al bebé sumergida a medio cuerpo en el recipiente, la llevaron en una motocicleta hasta el Hospital Eduardo Arredondo Daza, sede San Martin, en donde confirmaron su fallecimiento.
Las urbanizaciones, Hernando Marín y Lorenzo Morales, están llenas de familias vulnerables, desplazadas por la violencia, provenientes de zonas de alto riesgo de desastres, y no es la primera vez que por descuidos de los padres de familia, niños sufren fatales accidentes; caídas desde terceros pisos, quemaduras, desapariciones, ahogamientos y el flagelo de la droga.
“El mensaje a los padres de familia es que no descuiden a los hijos porque esto duele, esta vaina duele compa”, manifestó entristecido Cristian de Jesús.