En un fuerte golpe para la selección uruguaya, la Conmebol ha anunciado severas sanciones para once jugadores del combinado celeste, tras los incidentes ocurridos durante las semifinales de la Copa América 2024 frente a Colombia, en julio pasado.
Entre los castigados, el delantero Darwin Núñez ha sido quien recibió la sanción más dura: cinco partidos de suspensión y una significativa multa económica. Los demás futbolistas involucrados enfrentarán sanciones menores, con castigos que oscilan entre suspensiones de hasta cuatro encuentros y multas económicas.
El incidente, que tuvo lugar en el Bank of America Stadium de Charlotte, ocurrió luego de la derrota de Uruguay 1-0 ante Colombia. Al finalizar el encuentro, los jugadores uruguayos saltaron a las tribunas y se enfrentaron a golpes con aficionados colombianos, entre quienes se encontraban familiares de los futbolistas.
Las imágenes de la pelea, que se viralizaron en redes sociales, mostraron el inicio de las provocaciones por parte de hinchas uruguayos, quienes lanzaron gestos ofensivos y palabras contra los colombianos. A pesar de los intentos de los aficionados cafeteros por calmar la situación, la violencia se desató, dando lugar a un enfrentamiento generalizado en las gradas.
La Conmebol ha tomado una postura firme ante estos actos, en un esfuerzo por mantener el orden y la deportividad en el torneo. Las sanciones enviaron un claro mensaje de que la violencia en el fútbol no será tolerada, independientemente de la magnitud del partido o la frustración del resultado.