Aferrada al porta retratos con la imagen de su hija, Luz Daris Marquez, la madre de la joven Elis Johana Maestre Márquez salió a la puerta de la residencia de su progenitora en el barrio Doce de Octubre de Valledupar con el fin de hablar con los miembros de la prensa que acudieron a su llamado. Ella, 17 días después de la muerte de su hija, teme que el crimen quede en la impunidad.
Elias Johana tenía 15 años, y cumpliría 16 el próximo 28 de junio, y perdió la vida minutos después de recibir un disparo en la cabeza en momentos que se movilizaba en una motocicleta en compañía de su novio y de una amiga. El hecho se presentó al occidente de la ciudad, cuando al parecer un miembro de la Policía les disparó al no atender la orden de pare.
En diálogo con los medios, Luz Daris se muestra indignada porque casi 17 días después de ocurrido el hecho, a su casa no ha llegado nadie de la Policía ni siquiera a presentarle las excusas por lo ocurrido. “Si me pide perdón yo lo perdono, pero que se muestre arrepentido” dice en medio de su dolor esta mujer que recuerda a su hija como una niña que quería ser odontóloga.
Aunque los padres de Elias Johana reconocen que la Fiscalía haya estado muy pendiente del caso, repudian que no se sepa exactamente cual fue el agente que disparó, mucho menos si permanece en la institución.


