El Gobierno Nacional ha anunciado un significativo incremento en el precio del galón de diésel (ACPM), que subirá en $1.904 a partir del sábado 31 de agosto. Esta medida, según el Ministerio de Hacienda, busca aliviar la carga fiscal del país y generar un ahorro de $1,6 billones en lo que resta del año.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, explicó que el precio del ACPM ha estado congelado desde enero de 2020, acumulando 56 meses sin ajustes. “Hemos cerrado la brecha de la gasolina y ahora nos queda cerrar la del diésel”, afirmó. Este ajuste se enmarca en el esfuerzo por reducir el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC) y se espera que impacte la inflación en apenas 0,3 puntos porcentuales hacia finales del año.
El ministro Bonilla también criticó el subsidio que se ha mantenido para el ACPM, calificándolo de ineficiente y poco favorable para las finanzas públicas. Según el funcionario, los recursos destinados a este subsidio podrían ser mejor utilizados en apoyo a las familias vulnerables del país o en la construcción de infraestructura vial.
Aunque esta decisión ha generado reclamos por parte del sector transportador y otros gremios, el Gobierno mantiene su postura firme en pro del equilibrio fiscal y el saneamiento de las finanzas públicas.