Valledupar dio un paso decisivo en el fortalecimiento de su dinámica financiera tras recibir una actualización positiva en su calificación de riesgo por parte de Fitch Ratings, una de las agencias evaluadoras más importantes del país. El municipio pasó de AA- (col) a AA (col) en su evaluación nacional de manejo fiscal, un ascenso que refleja la mayor capacidad de la administración para cumplir con sus compromisos de endeudamiento y gestionar de manera responsable los recursos públicos.

De acuerdo con el informe, el comportamiento del desempeño operativo del municipio muestra una evolución favorable, soportada en un incremento del recaudo que hoy supera los ingresos propios, acompañado de un crecimiento significativo en las transferencias provenientes de la Nación. Este panorama, según el análisis de la calificadora, refuerza el perfil financiero de la capital del Cesar.

La secretaria de Hacienda, Lily Mendoza Vargas, celebró el logro institucional alcanzado bajo el gobierno del alcalde Ernesto Orozco Durán. “Esto nos permite generar confianza en las entidades crediticias, tener acceso a créditos públicos, potencializar la capacidad financiera y cumplir con los compromisos. Este es el resultado de hacer bien las cosas, con responsabilidad y criterios en el manejo de nuestros recursos”, aseguró la funcionaria. Agregó que “pasar de AA- a AA significa que las finanzas de Valledupar son vistas como más sólidas, estables y confiables”.

El municipio también mantuvo la calificación más alta a corto plazo: F1+ (col), indicador que confirma una capacidad muy sólida para cumplir pagos inmediatos relacionados con proveedores, servicios y obligaciones operativas. El informe detalla que el posicionamiento de Valledupar se mide en comparación con otras entidades territoriales con perfiles de riesgo similares, como Montería, Bucaramanga, Fusagasugá, Facatativá y el Departamento de Boyacá.

En Colombia, una calificación AA representa expectativas de muy bajo riesgo de incumplimiento y es la segunda más alta después de AAA. Este nivel demuestra que el ente territorial posee una gran capacidad de pago, un manejo adecuado de sus ingresos y un compromiso sólido con la responsabilidad crediticia.

Finalmente, Fitch Ratings recordó que sus evaluaciones son una opinión profesional, no una recomendación de inversión ni una garantía sobre el cumplimiento total de las obligaciones financieras. La agencia reiteró que su análisis se rige por los criterios establecidos en los decretos 610 de 2002 y 1068 de 2015, aplicables a la asignación de este tipo de calificaciones en Colombia.