Muchos de los venezolanos que se pueden ver  a diario en las calles de Valledupar, han huido de su país por la difícil situación que está atravesando su nación. Todos los entrevistados por Tuperfil.Net coincidieron en decir que hay hambre en Venezuela, hasta tal punto de durar varios días sin digerir las tres comidas diarias. Hoy muchas de estas personas migran hacia Colombia, ya sea en busca de víveres, como tránsito a otros países o para quedarse.

Los venezolanos mismos dicen que su futuro es incierto, lo que sí es seguro es que deben luchar día a día para subsistir;  en su mayoría venden chucherías, pulseras y limpian los cristales en los semáforos. Ganan entre 20 mil  y 25 mil pesos por día, pagan a diario 15 mil pesos por el alquiler de un cuarto con una colchoneta, el resto del producido, unos 10 mil pesos, es para el desayuno, almuerzo y comida.

Como dice el venezolano Guillermo Gonzales “no comer así una comida, ya uno sabe lo que puede comer, un almuerzo de 2 mil pesos…” pero en ocasiones no les alcanza el producido y deben dormir en algún parque.

En el caso de Georgiani Velázquez, migró de Venezuela con su esposo, embarazada y con un hijo de tres años. Es administradora de empresas y tenían dos fruterías en su país, hoy se encuentran en las calles de Valledupar, vendiendo dulces, su pareja con el pequeño de tres años y ella con él bebe de cinco meses.

Le preocupa las acciones de algunos de sus compatriotas, pues ya se han presentado dos casos de venezolanos que drogan a sus víctimas por medio de dulces.  “Eso perjudica a la gente que de verdad quiere trabajar, vendemos el confite, tenemos compañeros que venden galletas, y por lo que los demás están haciendo entonces pagamos nosotros, la gente tiene desconfianza, entonces si no vendemos, no comemos”.

Perdiendo los sueños

Según Jefferson Santiago de 16 años oriundo de Maracaibo, los jóvenes venezolanos perdieron sus aspiraciones en su país, dice que ya no vale la pena estudiar. “Deje mi estudio botado, qué vamos hacer estudiando y sacarte un título para seguir siendo nadie”, dice visiblemente desilusionado de la situación en su país.

La migración masiva del país vecino hacia Colombia ha aumentado de manera alarmante, para finales del 2017 se encontraban en nuestro territorio 550 venezolanos, aumentando en un 110 por ciento el flujo migratorio con referencia al año anterior.

Aunque personas como Georgiani Velázquez, esperan que todo cambie para volver a su tierra natal “ yo quisiera que mi país se compusiera para verme bien en un futuro”, lo que a diario sucede en ese país no vislumbra un panorama halagüeño.

Por Claudia Agudelo

@CLAUDIAAGUDELO4

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