El legendario ‘palo e mango’ que fue sembrado alrededor de los años 40 en la plaza Alfonso López fue declarado insignia de Valledupar, durante el lanzamiento del Plan de Manejo de Arbolado Urbano que traza la ruta para la protección y conservación de las 70 mil especies que están sembradas en la ciudad y que además recomienda la plantación de un número similar, con el fin de que se reduzcan en un 92% las emisiones de dióxido de carbono en la ciudad.
La iniciativa fue liderada por el alcalde Augusto Daniel Ramírez Uhía, quien colocó una placa al lado del mismo, en la cual se destaca su nombre popular y el científico, y lo referían como “testigo de la historia y página viviente de la cultura vallenata”. Dicha declaratoria será la primera de muchas que realizará el Municipio, para empoderar a los ciudadanos del cuidado de las especies, como lo sugiere PMAU.
A su vez, empezarán con la siembra de 70 mil más. “El gobernador Francisco Ovalle ya le puso la tarea al Secretario de Ambiente de sembrar 35 mil nuevos árboles y nosotros debemos aportar los otros 35 mil. Eso es importante, podemos hacerlo por etapas, la tarea puede ser sencilla si hay compromiso de los rectores y del Secretario de Educación”, explicó el mandatario de los vallenatos, al considerar que la meta será cumplida si establecen que dentro de los útiles escolares de los 120 mil estudiantes del Municipio de instituciones públicas y privadas, éstos deben aportar un árbol y encargarse de su cuidado.
La ejecución del Plan de Manejo de Arbolado Urbano tiene un valor de mil 510 millones de pesos, con base en las estrategias planteadas por el Servicio Forestal de Estados Unidos y el programa de Desarrollo Bajo Resiliente Bajo en Carbono de la USAID. Según el jefe de la Oficina Asesora de Planeación, Anibal Quiroz Monsalvo, el propósito es avanzar en el mismo y contribuir a la mitigación de los efectos del cambio climático.
