Valledupar apenas despidió con pesar al joven estudiante Fredy Pérez Romero, asesinado en medio de atraco por hombres que iban en caravana de motos la noche del pasado viernes, pero mientras esto sucedía en el sector de la avenida Sierra Nevada, por el monumento Pedazo de Acordeón al parecer sucedió algo similar: el compositor vallenato Higo Alfonso Amaya Romero fue baleado por la espalda por un hombre que se movilizaba entre un grupo de motocicletas, al parecer la misma que atacó al universitario, según fuentes extraoficiales conocidas por Tuperfil.net
Según narró Dainer Amaya, hermano de la víctima, sucedió en el entretiempo del partido de la Selección Colombia. “Iba para la cuarta, le entró una llamada y contestó: apenas contesta lo alcanzó la caravana unos tipos armados le quitaron un celular, pero detrás vienen otros le volvieron a pedir sus pertenencias pero él estaba asustado y no dio nada, ahí el conductor de la moto dijo ‘pégaselo’ y le dispararon por la espalda’, hiriéndolo en el glúteo”, dijo.
Una trabajadora de la Clínica Erasmo, según allegados a la víctima, se percató de la situación y lo traslado hasta ese centro asistencial a pocas cuadras de los hechos, pero con este centro asistencial no tenía convenio su EPS, Cafesalud. De allí fue llevado a la Clínica Laura Daniela, pero no había espacio donde atenderlo y finalmente llegó a la clínica Santa Isabel.
Higo Alfonso Amaya Romero, ganador del concurso de la canción inédita en el Festival de la Tinaja, recibió un impacto de arma de fuego en el glúteo izquierdo y la bala le quedó incrustada en la pelvis y hasta este lunes, permanecía atendido en la clínica Santa Isabel a la espera de la extracción de la bala.
Intimidado dos veces en el mismo momento y baleado, Amaya Romero recordó que hace meses le quitaron dos millones de pesos que acababa de retirar de un cajero automático; dos meses después lo atracaron y le quitaron un celular y este viernes, noche de futbol, le ocurrió este percance.
Mientras tanto, las autoridades de policía anunciaron medidas drásticas para combatir la ola de atracos que se viene presentando en la ciudad desde hace algunos años, y que por momentos, según los especialistas arrecia.