Pese a la prohibición del Presidente Iván Duque de no despedir personal, mucho menos pertenecientes al sector de la salud en plena pandemia, la gerente del hospital Rosario Pumarejo de López, despidió alrededor de 50 personas del centro asistencial.
Se trata de trabajadores pertenecientes al área de facturación, conductores de ambulancias Y camilleros, quienes fueron reemplazados de inmediato.
Los trabajadores despedidos decidieron entonces agolparse en las instalaciones del centro asistencial con el fin de realizar un plantón, para más que exigir el reintegro, lo que pidieron fue que les paguen sus salarios atrasados, que en total son 8 meses.
» Con esos ocho meses de atraso, veníamos a laborar, sacrificando a nuestra familia, dejándolos sin comida» dijo Nini Ávila, una trabajadora despedida.
La protesta fue disuelta por parte de agentes de la Policía, cosa que rechazaron los trabajadores despedidos.
» El hospital no nos va a contratar de nuevo, lo que queremos es que nos paguen lo que nos deben» dijo Nini Ávila.
