La Plenaria del Senado colombiano ha aprobado por unanimidad una ley que prohíbe el uso de «marcas de gobierno» personalizadas por cada administración, una medida promovida para prevenir la promoción institucional de la imagen de los mandatarios a través de eslóganes o colores de campaña. La senadora Angélica Lozano subrayó que esta normativa busca eliminar los gastos recurrentes y la transformación de elementos de campaña en símbolos institucionales cada vez que se inicia un nuevo mandato gubernamental.
Según la senadora, la ley establece que el gobierno actual debe hacer uso de los materiales ya producidos hasta que se agoten, sin la necesidad de producir nuevos. “Si hay 100.000 folletos impresos, se deben distribuir hasta que se terminen, pero no se deberían imprimir más”, señaló Lozano.
La nueva reglamentación da un plazo de seis meses, a partir de su sanción y promulgación, para que todas las entidades estatales adopten un manual de identidad visual que elimine cualquier logo o publicidad que magnifique la figura de los gobernantes actuales. Este cambio promueve el uso de una identidad que resalte los valores históricos y culturales y los escudos oficiales, generando un potencial ahorro de hasta 2,4 billones de pesos que se destinaban a publicidad gubernamental.
La ley también prohíbe el uso de fondos públicos para autopromoción, realzar o menoscabar la imagen de cualquier funcionario del gobierno a nivel nacional o territorial, así como la promoción de cuentas personales o de partidos políticos en redes sociales y otros medios.