Enoc Clavijo ha sido considerado durante muchos años como uno de los más grandes líderes indígenas de la costa colombiana. Él quien pertenece a la etnia yukpa, escaló tanto al interior de su etnia que terminó liderandolos hasta llegar a ser candidato a la Alcaldía de Codazzi Cesar, municipio en cuya serranía habita gran parte de esta etnia.
Para aspirar al primer cargo del municipio de Codazzi, fue respaldado por el partido Asi ( Alianza Social Indígena) y su campaña la basó en el discurso de conocer bien las necesidades de sus hermanos indígenas.
Pero no le alcanzó. Clavijo fue vencido por el hoy alcalde Luchito Peñaloza, el más polémico de los alcaldes del Cesar.
En las últimas horas Enoc Clavijo fue capturado por agentes del CTI y del Gaula del Ejército cuando se encontraba en Valledupar, en cumplimiento a una orden de captura emitida en su contra al existir un proceso en el que se le acusa del delito de peculado en concurso homogéneo y sucesivo y asociación para cometer un delito contra la administración pública.
Clavijo habría cometido el delito siendo gerente de la EPSi Dusakawi, y con él fue capturado el contratista Hernán Osorio Villero.
Según las autoridades tanto Osorio Villero como Clavijo Franco, son señalados de desviar dineros de la salud a empresas fachadas, los cuales iban a nombre del contratista haciéndolos pasar como suministros de medicamentos y transportes de enfermos, que según las investigaciones jamás se realizaron.
El dinero era otorgado por el estado para los pueblos indígenas, fondo que supera los 3 mil 950 millones de pesos.
Con la captura de Clavijo surge nuevamente la pregunta de si los líderes indígenas se aprovechan de su etnia como lo hacen los políticos en su mayoría y quienes no se reconocen como miembros de una etnia. ¿O simplemente se trata de una persecución política?. La justicia deberá resolver los interrogantes.
