“Estamos en las manos de Dios”. Así se expresó la señora Neydis Maldonado, madre del joven de 16 años, Nicolás Picón Maldonado, secuestrado desde el pasado 24 de agosto, al ser sacado de su residencia por varios delincuentes en el municipio de Aguachica.

Con la voz quebrada, la señora Neydis Maldonado señaló que no pensó que a su hijo lo quisieran tanto, como lo expresaron en las jornadas de rechazo al secuestro, que se llevaron a cabo este fin de semana en varias poblaciones del sur del departamento del Cesar.

Estas expresiones son un aliciente para esta mujer que hoy padece mucha preocupación por el silencio de los secuestradores. “Estamos como el primer día, no sabemos si es delincuencia común” señaló la madre, añadió que su familia está “en las manos de Dios, él está obrando”.

“El día de hoy mi niño lleva 13 días, sin nosotros saber nada del paradero de mi hijo”, dijo la madre del menor, señaló también que lamentablemente ante el ofrecimiento de 50 millones de pesos por parte del gobierno para esclarecer el secuestro, algunas personas han ofrecido información errada.

“Hay gente que ha llamado, pescando en rio revuelto diciendo que tienen a mi hijo, pero pedimos pruebas, y no nos han enviado nada que garanticen que si lo tienen” acotó la madre.

Con respecto al video que ha circulado en el que se observa a la empleada de servicio ingresando a la casa, donde se llevó a cabo el secuestro,  se abstuvo de manifestar que sospechen de esto.

“De pronto ya le venían haciendo seguimiento, pero en estos momentos no podemos señalar si la señora tiene algo que ver, porque todos somos sospechosos para las autoridades” anotó la Neydis Maldonado madre del joven secuestrado.

“El llamado es nuevamente, decirles que por favor que suelten a mi hijo, que liberen a mi hijo ya, no tenemos rencor hacia ellos, el único que los puede juzgar es Dios, y si se arrepienten Dios los puede perdonar” recordó la madre de familia, al señalar que ayer su hijo no pudo llevar a cabo las pruebas ICFES.

“Que no le niegan la oportunidad de graduarse” pidió la señora Neydis Maldonado, a los secuestradores de su hijo a quien calificó a su hijo como un niño noble y amigable, al igual que comentó los sueños del menor de ir a la universidad y servir a la comunidad.

“Mi instinto de madre me lo dice, que él no está muerto” concluyó visiblemente conmovida la señora Naydis Maldonado.

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