Desde hace 50 años los ojos de Colombia y con el pasar del tiempo los del mundo, han estado puestos en Valledupar y por ende en su música vallenata. Con el pasar del tiempo al darnos cuenta que era necesario separarnos de aquel Magdalena grande para convertirnos en el departamento del Cesar y tener como capital a la ciudad de Valledupar, nos fue haciendo una ciudad de reconocimiento con músicos talentosos, compositores excepcionales que lograron entrar a la más alta alcurnia cachaca, pero como siempre, el turista que visitaba nuestras tierras para la época del festival vallenato se iba con la satisfacción de haberse disfrutado un festival pero con la desilusión de no tener un recuerdo tangible de lo que había vivido.
Hoy, casi 50 años después puedo decir que Tuto uhia (joven alcalde de Valledupar) ha logrado en estos casi 14 meses y cuando el festival de la leyenda vallenata cumple 50 años, volver a la ciudad de Valledupar, una ciudad tangible.
Nuestra música vallenata no se podía retratar, el turista no tenía como ver la música impresa en el lente de sus cámaras fotográficas o en sus retratos. Hoy día en cada esquina de la ciudad, podemos encontrar un parque que nos permite retratarnos con la música vallenata, nos podemos llevar a Valledupar y su bello nombre en un retrato.
Sé que vamos bien y que al lograr Tuto hacer del folclor de la música vallenata y de nuestra ciudad algo tangible, el turista se ira satisfecho con un recuerdo que le permitirá decir “estuve en Valledupar donde la música vallenata no solo se puede bailar, sino, fotografiar.”
Bienvenidos a los 50 años del festival más grande y glorioso que tiene Colombia y el mundo de música vallenata, bienvenidos a Valledupar la ciudad donde tocar la música, fotografiarla, bailarla, disfrutarla y sentirla, es posible hoy día gracias al ingenio talento y visión que reposan en el corazón y la mente de un gobernante que ama y vive a su ciudad de día y de noche como lo es Tuto Uhia.
Por Alfredo Saade Vergel
