En el Cementerio Central de La Paz, Cesar, tierra que lo vio nacer y crecer, será sepultado El Jilguero de América, Jorge Oñate, quien, a pesar de dar la batalla por más de un mes, una serie de enfermedades, entre ellas el Covid–19, acabaron con sus fuerzas hasta causarle la muerte.
Oñate, una de la voz más representativos del folclor vallenato, recibía atención médica desde el pasado 23 de febrero en el Hospital Pablo Tobón Uribe, de Medellín, luego de ser trasladado desde Valledupar, donde permaneció varias semanas entubado.
El Jilguero será despedido como merece, con homenajes y actos ceremoniales en compañía de la Gobernación del Cesar, la Fundación del Festival Vallenato que le tenía programado un homenaje, pero a raíz de la pandemia no se pudo realizar y demás entidades del folclor que lamentan la partida de este grande del vallenato.
Son muchos los mensajes de solidaridad que ha recibido la familia del Jilguero de sus colegas y fanáticos, afecto que se siente en su tierra natal, donde el alcalde del municipio, Martín Zuleta, decretó tres días de duelo.
