Algunos congresistas pedían la salida del Director Nacional de la Policía por su posición religiosa, por reconocer que hasta exorcismos se hacían al interior de la institución para esclarecer casos, cosa que no es nueva, pues recuerde que hasta brujos han sido contratados en otros tiempos por la misma Fiscalía para ofrecer resultados.
. El presidente Petro decidió relevarlo de su cargo, porque el director de la Policía no estaba ofreciendo los resultados que él país exigía. Oigase bien, que exigía el país, pero no el Presidente, quien desde el inicio de su administración ha enviado a su fuerza pública un mensaje de excesa tolerancia hacia la delincuencia.
Una policía debilitada desde el inicio del mandato al sacar de sus filas a importantes oficiales, y ahora le da tremenda estocada, saca a un oficial cuya experiencia en la fuerza pública, de seguro estará en poco tiempo, al servicio de la empresa privada. ¡ Que desperdicio!.
A Sanabria no le pesó la camándula, le pesaron los muertos, los pocos resultados de la institución. Resultados orientados por su comandante en jefe, el Presidente.
Y ya que estamos hablando de cambios señor Presidente, ¿ por qué no hace un cambio por acá por el Cesar?. La policía en nuestro departamento no es que esté bien liderada. Los resultados hablan por sí solos, llevamos más de 40 muertes violentas este año. Al comandante de la policía en el Cesar se le nota mucha fragilidad, debilidad, hasta a la hora de hablar.
