Me van a disculpar los barranquilleros, pero aquí ya los estamos imitando. Y no precisamente por su carnaval. Por acá desapareció hace muchos años. Ni por el hablao. Tenemos nuestro propio cantaito. Ni siquiera por la música porque por estos lados somos los que mandamos con el vallenato.
Los estamos imitando por los arroyos. Después de ustedes barranquilleros, en Valledupar nos convertimos en los subcampeones , porque ustedes siguen de campeones en lo que tiene que ver con arroyos en las calles.
Quedó demostrado este miércoles 20 de noviembre, cuando el fuerte aguacero que cayó sobre la ciudad nos puso en jaque de nuevo. Carros varados, motos apagadas, y los atracadores de la avenida los militares pescando en río devuelvo. Osea en arroyo revuelto.
Y mientras tanto el alcantarillado pluvial qué.
Pues les cuento:
Las obras de la segunda parte del alcantarillado están detenidas desde mitad de año . ¿ Y la razón?. Pues que cuando el contratista inició la obra descubrió que los estudios previos, en donde se gastan un montón de plata, no mostraron la realidad de lo que se necesitaba. Así las cosas había que reformular el proyecto.
Y como es el Ministerio de Vivienda el que aprueba la reformulación del proyecto ahí está el proyecto durmiendo el sueño de los justos. Vainas del cambio. De gobierno, porque de tramitomanía seguimos igual o peor que antes.
Mientras tanto ayúdeme a pedirle a Dios que no siga lloviendo torrencialmente en Valledupar como este miércoles, porque de lo contrario seguiremos con el agua hasta el cuello mientras no se saben hacer estudios previos, y mientras el min vivienda se acuerda que por acá le están pidiendo cambios al proyecto. Para decir que sí, de seguro ordenarán nuevos estudios.
