Tiene 39 años de edad, y este año recibió la sorpresa más triste de su vida. Un cáncer podría llevarla a la muerte, sino se hace como debe ser, el tratamiento a tiempo.
Es Elvis María Ríos Vega una ama de casa que el pasado 5 de marzo, se enteró que tenía un linfoma No Hodking, un tipo de cáncer que ha llevado a la tumba a miles de personas en todo el mundo. Lo presenta a la altura del ojo izquierdo, y todo comenzó con una rasquiña y un fastidio como si tuviera un sucio allí. Eso la llevó a consultar al médico, logrando que gracias a los exámenes realizados, le descubrieran la grave patología.
Pero para poder acceder a los exámenes y al tratamiento, le ha tocado entablar ya dos tutelas. La primera fue para que la remitieran donde el alergólogo, luego de presentar una reacción alérgica a las primeras quimioterapias que se le realizaron. La tutela falló a su favor.
Pero se requería conocer el alergólogo si las quimioterapias le habían causado algún daño en su organismo, por lo que requería unos estudios como rayos X de tórax y electrocardiograma.
Debido a la demora de Salud Vida para el traslado a una clínica más especializada, y atendiendo el consejo de un hermano, se fue por su cuenta para la clínica Ardila Lule de Bucaramanga.
Allí la vio el doctor Alberto Díaz, quien le ordena unos estudios más avanzados, entre ellos una resonancia de contraste y la misma resonancia recomienda una biopsia. Se hace el procedimiento, el cual arrojó como resultado que se trataba de un caso muy difícil. Primero le indicaron que era un tumor pequeño y benigno, pero luego mediante otro estudio determina que el tumor era más delicado.
Las tutelas
La primera tutela contra Salud Vida, llegó debido a que el médico le dio una cita para dos meses con el alergólogo cuando iniciaba el tratamiento de quimioterapia. La tutela falló a su favor, y se logró que la EPS le diera una cita con un alergólogo.
La segunda tutela fue debido a que el médico Raúl Cervantes, quien es radioterapeuta, le dice que debe hacerse una resonancia en la clínica Buenos Aires, no obstante otros galenos le indicaban que su tratamiento era de cuarto nivel.
Dicha tutela falló a su favor, indicando que el tratamiento de radioterapia debe realizarse fuera de la ciudad. No obstante la EPS Salud Vida hasta el momento solo le ha cumplido a la paciente remitiendola a Cartagena a una cita con el radioterapeuta, pero no le han facilitado el tratamiento con este. Debido a esto la paciente decidió entablar una acción de desacato hacia la EPS.
Elvis ahora espera que la acción de desacato salga a su favor, o de lo contrario su vida estará más en riesgo.
