En respuesta al perturbador incidente de violencia que involucra a un niño perteneciente a la etnia arhuaca, quien sufrió presuntamente mutilación a manos de su tío político en una zona rural del municipio de Pueblo Bello, Cesar, la directora seccional Cesar del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. , ICBF, Esther Cristina Calle, ha expresado su repudio por el acontecimiento. La funcionaria espera que las autoridades competentes conduzcan una investigación exhaustiva y obtengan resultados prontamente para sancionar al responsable.
La directora del ICBF ha anunciado que la institución activará todos los procedimientos necesarios para restaurar los derechos del niño afectado y proporcionarle toda la atención requerida, tanto a él como a su familia.
«Nos quedamos verdaderamente sin palabras ante esta situación; desde el ICBF condenamos cualquier acto de violencia o agresión hacia nuestros niños y niñas», declaró Esther Cristina Calle. La directora señaló que, a pesar de que la comunidad arhuaca posee su propio sistema de justicia, en lo que respeta a los niños y niñas, sus derechos prevalecen sobre todos los demás derechos. Por lo tanto, las autoridades competentes tienen la obligación de investigar y proteger a las víctimas.
En un comunicado reciente, el Instituto de Bienestar Familiar informó que ha designado una Defensoría de Familia en Barranquilla para verificar la garantía de los derechos del menor y abrir un proceso administrativo de restablecimiento en su favor en relación con este caso de maltrato y violencia. Además, se le ha asignado una madre sustituta al menor, quien le brindará apoyo mientras se recupera y hasta que se determine la medida de protección más adecuada para garantizar sus derechos.
El ICBF ha asegurado que acompañará a la familia en la persecución de las acciones penales necesarias y proporcionará apoyo psicosocial tanto al niño como a los miembros de su núcleo familiar.
Según información conocida por este medio, el menor estuvo bajo el cuidado de sus abuelos en los últimos años, pero su abuela falleció el año pasado, lo que lo dejó al cuidado de una tía que es la compañera sentimental del presunto agresor del niño.
