Las lluvias de los últimos días en la ciudad de Valledupar, han traído un alivio a las olas de calor que por este mes abrazan la capital, pero también y no tan positivo, han traído problemas con los rebosamientos de manjoles. Uno de estos es en la avenida 27 o Emiliano Zuleta, donde los habitantes del sector, ya se encuentran cansados
El jefe técnico de Emdupar, José Laíno, dijo que, aunque la avenida 27 es relativamente nueva, se vienen presentando estos rebosamientos por lo que se presume que se encuentra una obstrucción, posiblemente producto de algún escombro del proceso constructivo en su momento. Por el momento se estarán realizando mantenimientos con periodicidad en la zona, con el fin de evitar una demolición de la obra para intervenir la afectación, que no tiene más de tres años, sin embargo, si la obstrucción es imposible de solucionar, la intervención será inminente.
Se acuerdo con Laíno, lo más triste es que se han encontrado desechos que por lógica y cultura ciudadana no deberían ser desechados por las redes de alcantarillado.
“Lo más curioso es que es muy frecuente encontrar pañitos húmedos, pañales, toallas higiénicas y todo tipo de elementos que lo que demuestra y deja en evidencia es la falta de cultura de nosotros como usuarios, de nosotros como ciudadanos” dijo el funcionario.
Laíno explicó que esta clase de elementos no desaparecen una vez son desechados por la red de alcantarillado, sino que se acumulan y con las lluvias se desplazan hasta formar las obstrucciones.
Estos problemas no se presentan solo en las nuevas obras u urbanizaciones recién construidas. En algunos barrios como Ichagua, Los Músicos, Los Cortijos, los rebosamientos también se presentan. El jefe técnico de Emdupar dice que estos rebosamientos también son producto de una falta de inversión, ampliación y optimización de las redes de alcantarillado, lo cual dificulta prestar un servicio óptimo para una ciudad que ha ido creciendo aceleradamente.
