Los Venados, marzo 5
«Aquí la gente se nos muere. No tenemos ni una ampolla para colocarle para el dolor a las personas” dijo María Inés Suárez, habitante del corregimiento Los Venados, luego de la decisión de la comunidad de cerrar las puertas de esa institución, como protesta por la falta de insumos y de buena atención. “ Simple y sencillamente tenemos que salir el que tiene las maneras para Mariangola, para Bosconia, para que nos presten el servicio, porque aquí el médico trabaja con las uñas» dijo la residente en Los Venados.
La falta de insumos y la ausencia de un médico de turno los fines de semana ha generado un profundo malestar en la comunidad, que exige una solución inmediata por parte de las autoridades de salud. La protesta que inició la protesta luego de la muerte de un niño de dos años que no pudo ser atendido en el puesto de salud, continuará hasta que se garantice la presencia permanente de un médico y se mejore la dotación de medicamentos e insumos en el puesto de salud local.
«Nosotros aquí no tenemos como una bala de oxígeno, un puesto de reanimación. Aquí la gente se nos muere. No tenemos ni una ampolla para colocarle para el dolor a las personas” enfatizó Suárez.
Esta no es la primera vez que la comunidad de Los Venados se ve obligada a protestar por la precaria situación de su puesto de salud. A pesar de las promesas anteriores de las autoridades locales, la situación no ha mejorado, lo que ha llevado a los habitantes a tomar medidas más drásticas para hacerse escuchar.
El alcalde Ernesto Orozco ha sido llamado a intervenir de manera urgente para resolver esta crisis y garantizar que todos los habitantes de Los Venados tengan acceso a una atención médica digna y oportuna.
«Es inaceptable que nuestros conciudadanos tengan que enfrentarse a esta falta de atención médica básica. Debemos trabajar juntos para garantizar que esto no vuelva a suceder», afirmó la habitante en Los Venados.
Las autoridades de salud del departamento del Cesar han sido instadas a tomar medidas inmediatas para abordar esta crisis y garantizar que todos los ciudadanos, independientemente de su ubicación geográfica, reciban la atención médica que merecen.
