La comunidad del corregimiento Aguas Blancas estuvo a punto de bloquear la vía nacional este miércoles para llamar nuevamente la atención por los estragos que ocasionan las inundaciones que se generan por las lluvias desde que se construyó la nueva carretera por parte de Yuma.
Finalmente, líderes comunitarios del corregimiento decidieron no hacer la manifestación y darle un compás de espera a Yuma para que solucione lo que ha ocasionado la construcción de la carretera, que bordea la zona oriental del corregimiento.
La insatisfacción es total desde que escucharon en una reunión realizada la tarde del pasado lunes 11 de julio la propuesta de la concesionaria para mitigar las inundaciones que se generan desde octubre del año pasado.
Yuma presentó un informe técnico sobre la solución que propone, la cual refleja que la canalización proyectada para que las correntías de aguas lleguen a los puntos de drenaje y sigan su curso natural al otro lado de la vía no tendría revestimiento o base de concreto.
Además, quedaría un sembrado de semilla de palma para fortalecer la tierra para que el agua no se estanque en las casas de la zona. Para la líder comunitaria, Yajaira López, esto no da seguridad que el problema sea solucionado.
“Estas propuestas como comunidad no se las aceptamos. Sigue la situación grave de Aguas Blancas. No podemos seguir permitiendo que esta empresa (ANI) junto con Yuma se vayan del corregimiento y nos dejen con esta grave situación”, comentó Zapata.
La gran preocupación de la comunidad es que la segunda temporada de lluvias en el año, que iniciará en los próximos meses, tradicionalmente es la más fuerte y no quieren volver a sufrir por inundaciones y daños de enseres y de cultivos. “Esto sería caótico”, sentenció la líder comunitaria.
La comunidad quiere la Alcaldía de Valledupar, la Gobernación del Cesar y otras autoridades competentes tengan conocimiento de lo que ocurre para exigir que las condiciones de vida que tenían antes de la construcción de la vía se mantengan.
