Luego del accidente ocurrido en la vía que une a los corregimiento de Guaymaral y El Perro, el cual dejó tres personas muertas el pasado 25 de diciembre en horas de la madrugada, quedó evidenciado que si en la zona urbana de Valledupar las medidas decretadas por el gobierno municipal son irrespetadas, ocurre peor en la zona corregimental.
Habitantes de corregimientos como Los Venados, Guaymaral, El Perro, denunciaron que los desobedientes a las medidas pululan en las calles de esas poblaciones.
No obstante, Arturo Álvarez, corregidor de El Perro, dijo que luego de los cambios que hubo en la policía en el corregimiento de Los Venados, mucha gente ha decidido desplazarse durante las celebraciones al corregimiento de Mariangola, donde las cantinas acogen a los parranderos.
Álvarez invitó a las autoridades entre ellas al ICBF, a tomar medidas con el fin de hacer control entre quienes insisten en violar decretos como el toque de queda que rige desde las 12 de la noche los días de fiesta.
El corregidor indicó que las motocicletas no son peligrosas, sino que se hacen peligrosas cuando se conducen con irresponsabilidad, como ocurrió en el accidente del 25 de diciembre en la madrugada.
