Una serie de verdades a medias fue lo que parece haber declarado ante el juez quinto penal del circuito de Valledupar, el señor Luis Alcides Osorio Molina, quien está sindicado de asesinar con un tiro de escopeta, a su hermano Diomedes Osorio Molina, en hechos ocurridos el 25 de Julio del año 2013 en una finca del municipio de Becerril Cesar.
Si bien es cierto Osorio Molina reconoció haber asesesinado a su hermano, en las declaraciones que entregara ante el juez y las cuales fueron reproducidas textualmente por algunos medios de comunicacion, practicamente el confeso asesino señala que el crimen lo cometió en defensa propia.
Según Luis Alcides, él decidió disparar contra su hermano Diomedes Osorio porque este lo amenazó con un machete al intervenir en una discusión que sostenía el victimario con el hijastro del fallecido.
Esta parece ser una versión apoyada por la Fiscalía, que en la audiencia ante el juez, señala que “hizo un disparo porque era injusto que lo atacara y lo amenazara con un machete”, según cita el portal www.elpaisvallenato, en la nota donde se registra la noticia.
No obstante Tuperfil.Net, primer medio en dar a conocer esta noticia hace casi cuatro años, registró una declaracion de la señora Yolima Hernández, viuda de Diomedes Osorio, quien dio a conocer en su momento que su esposo asesinado lo único que intentó fue evitar una tragedia, al colocarse en medio de su hijo y su hermano quien muy molesto amenazaba al entonces menor con una escopeta.
» Si los vas a matar a él, primero me tendrás que matar a mi» fueron las palabras textuales de Diomedes Osorio antes de recibir el disparo en el corazón que acabó con su vida, dijo en su momento Yolima Hernández, quien nunca ha cambiado su versión.
Otro elemento adicional que al parecer termina favoreciendo a Luis Alcides Osorio, es otro supuesto testigo que ahora aparece en el caso. No obstante el día del asesinato al parecer en el lugar solo se encontraba la hoy viuda de la victima.
La audiencia en la cual se conocerá el fallo contra Luis Alcides Osorio Molina, será el 31 de enero. Se espera que el confeso asesino no pague más de diez años de cárcel.
