La comunidad arhuaca pretende que 17 hectáreas ubicadas en el municipio de Pueblo Bello, y que ellos llaman Marikuku, sea entregado a esa etnia, para llevar a cabo prácticas espirituales.
De hecho existía un acuerdo entre la administración municipal de Danilo Duque y la etnia, en la que el mandatario municipal se comprometía a hacer dicha entrega , pero el compromiso fue incumplido.
Así fue denunciado por la comunidad indígena ante la Procuraduría Preventiva de Gestión 4 para asuntos étnicos, la cual convocó al Gobernador del Cesar, al Director de Corpocesar así como al Alcalde de Pueblo Bello, a un encuentro en el cual se deberá resolver esta situación.
Gelver Zapata líder del equipo de apoyo a autoridades arhuacas dijo a este medio de comunicación que este “ no es el único lugar que se encuentra en esas condiciones”.
“ Hacemos un llamado para que los entes de control y autoridades comiencen a desarrollar un trabajo para que esta situación no vaya a generar más estragos” indicó..
Anotó que el espacio que ellos vienen reclamando, lo tomó el Municipio para adelantar un proyecto de vivienda, una planta de acueducto y últimamente han sido vistas allí, una maquinaria mientras que otra parte permanece invadida.
“Toca generar unos acuerdos para que por el momento, los espacios que no han sido utilizados no sean intervenidos y generar un acuerdo “ dijo Gelver Zapata al señalar que ellos no permitieron que el Municioio se apropiara, sino que confiaron en que el Alcalde Danilo Duque iba a cumplir con el compromiso de entregarlo a la etnia.
Aunque en la actualidad la comunidad arhuaca en Pueblo Bello no tiene representación legal, indicó Zapata que existen las autoridades regionales, así como mamos. “ Pensamos que para darle garantía a los derechos a los pueblos, no necesariamente se deben hacer con representante legal-“
