Un mensajero de la empresa de domicilios Serviexpres, vivió momentos de tensión la tarde de este miércoles, cuando fue a buscar un servicio en el corregimiento de Sabana Crespo nor occidente de Valledupar.
El joven permaneció varias horas en un paraje solitario, amenazado por medio de una llamada en la que delincuentes le decían que si se movía le iban a disparar, ya que en sus alrededores, escondidos, había por lo menos 200 hombres armados.
Al tiempo que el mensajero permanecía con su teléfono hablando con los supuestos secuestradores, en la empresa también recibían una llamada de los mismos delincuentes.
La historia que le contaban los sujetos a Karen Osío, gerente de la empresa de mensajería, era que el mensajero estaba secuestrado, y para liberarlo deberían girarles la suma de 12 millones de pesos.
Durante el difícil momento, la administración de la empresa de servicios de domicilio se comunicó con el Gaula de la Policía. Los efectivos le indicaron a la empresaria, que lo que estaba ocurriendo, era una modalidad de extorsión y que no debían acceder a las pretensiones de los delincuentes.
Pese a que este hecho fue denunciado ante el Gaula de la Policía y ante agentes que se ubican en el CAI cerca de la Pedregosa, por parte del propietario de una finca del sector, quien notó que la situación se tornaba sospechosa, la respuesta que recibieron fue la misma que le había entregado a la señora Karen Osío, y es que se trataba de una modalidad de extorsión, a lo cual se limitaron porque no recibieron ni el joven domiciliario ni la empresa de mensajería acompañamiento alguno.
Relató Karen Osío respondieron con un simple “ellos no tenían nada que hacer allá”.
Fueron más de 20 los compañeros mensajeros que se dirigieron ya en horas de la noche al paraje solitario a rescatar al joven que se encontraba muy atemorizado.
Ya algo así había ocurrido
De acuerdo con Karen Osío, esta es una situación que se viene presentando muy seguido, porque recientemente ellos recibieron una llamada desde una cárcel en Valledupar, en la cual los contrataron para recoger el dinero de una extorsión a una persona que estaba siendo víctima de estos sujetos. Fueron entonces las autoridades las que les advirtieron que estaban siendo víctima de este delito, pero luego de argumentar como habían sido contactados, fueron absueltos de cualquier investigación.
Luego de este caso, la empresa de mensajería tomó determinaciones acerca del protocolo para la prestación del servicio. “ Estaremos llevando a cabo nuestras propias precauciones, porque definitivamente las autoridades no están haciendo mucho” dijo Osío.
