El estadio Armando Maestre en Valledupar, donde el Alianza FC hizo su debut en la primera división, se vio afectado por el mal estado de la cancha, empañando el emocionante empate 3-3 contra el Deportivo Cali. Sectores como el banquillo norte mostraron un césped deteriorado, afectando el desempeño de los jugadores.
Sin embargo, se ha revelado que la semana pasada, una empresa brasileña, en colaboración con la CONMEBOL, realizó una visita al estadio Armando Maestre Pavajeau. Esta empresa, reconocida por su participación en la recuperación de campos de juego en el Mundial de Brasil 2014, envió un equipo de expertos, incluyendo un agrónomo, un ingeniero civil y un arquitecto, para examinar la situación.
Tras inspeccionar la grama y el estadio, el grupo de expertos emitió recomendaciones y determinó que, siguiendo estas pautas, el escenario estaría listo en un 90% para el próximo partido contra Junior. Asimismo, señalaron que para el enfrentamiento contra América, la grama debería estar al 100%, aunque reconocieron que este partido de la Sudamericana depende de diversas variables.
Por otro lado, el estadio La Independencia de Tunja ha sido nuevamente objeto de críticas por sus deficientes condiciones. A pesar de las quejas desde 2023, Patriotas disputó su primer partido de la temporada en este escenario, enfrentando problemas recurrentes como áreas con césped seco y riesgos de lesiones.
La Alcaldía de Tunja autorizó eventos en el estadio en diciembre de 2023, contribuyendo a más daños en la cancha. Aunque se espera que la nueva administración aborde las reparaciones necesarias, organizaciones como Acolfutpro han expresado previamente que el estado de la cancha «no es apto para jugar fútbol profesional» y representa un riesgo para los jugadores.
