En el colegio Manuel Rodríguez Torices del municipio de San Diego Cesar, los viernes son literalmente culturales. Esto porque ese día, a los docentes al parecer no les gusta dictar clases.
Así lo aseguraron padres de familia de estudiantes de ese plantel educativo, quienes indicaron que ya van varios viernes en el que no se dictan clases por decisión de los profesores.
“ Todos los viernes se inventan una actividad para no trabajar” dijo el padre de un estudiante quien pidió mantener en reserva su identidad.
De acuerdo al padre de familia, lo peor es que los martes y miércoles, los docentes les piden que vayan a buscar a sus hijos más temprano.
A esto se suma la queja de algunos padres de familia por la mala alimentación escolar que vienen recibiendo los estudiantes. “ Les dan una mogolla dietética y un guineo” dijo una madre de familia visiblemente molesta por esta situación.
Ante esto, los padres de familia hacen un llamado al gobierno municipal de San Diego para que revise esta situación que según indican, atenta contra la calidad educativa de sus hijos.
