No ha resultado en luna de miel, la relación de ninguno de los comandantes que ha tenido el Cuerpo de Bomberos de Valledupar con los miembros de la línea de fuego. Por lo menos las lunas de miel no han sido duraderas, en cualquier momento una chispa genera un verdadero incendio al interior del organismo de socorro. Si no es a la entrada, es a la salida, no hay comandante que se salve de los cuestionamientos de sus muchachos.
Y no es para menos, a los comandantes se les pone ahí para que solucionen, para que apaguen fuegos administrativos, porque de los otros no tienen ni idea, pero al parecer, el agua no les alcanza porque el déficit de la entidad sigue extendiéndose cual incendio forestal incontrolable.
Vamos a sincerarnos, ¿queremos que desaparezca de una vez por todas el Cuerpo Voluntario de Bomberos para que nazca con holgura, con tranquilidad el Cuerpo Oficial ?. «Es necesario que yo mengue para que él crezca», dijo Juan Bautista.
Pero, ¿no pueden acaso convivir ambos organismos de manera alterna?. Al parecer no, porque entre otras cosas, hay quienes están cansados de los conflictos internos entre los miembros del Consejo de Oficiales, y de estos con los comandantes, y los comandantes con la línea de fuego.
Dongo le dio a Borondongo, Borondongo le dio a Bernabé.
Apaguemos ese fuego de una vez por todas, hagamos algo con el Cuerpo de Bomberos, no es justo con unos trabajadores tan necesarios en esta ciudad, no es justo con una ciudad que no tiene cultura para evitar hechos como los incendios forestales que son de las emergencias más recurrentes. No es justo con una ciudad con tan mal servicio de agua, allá llegan los bomberos a apagar el fuego, a calmar la sed.
Por Limedes Molina U
@LimedesMolinaUr
