En el marco de la pandemia por el Covid-19, la Secretaría de Educación Municipal ha venido realizando la entrega de tablets a distintos planteles educativos del municipio de Valledupar con el fin de facilitar la educación virtual de los niños. El pasado 17 de septiembre fue el turno de la Institución Educativa Prudencia Daza, a quienes se les hizo entrega de un total de 100 tablets. Sin embargo, el problema se presentó cuando el lunes 26 de octubre, mientras se organizaba la entrega de estas, las directivas de la institución se percataron de que no había ninguna en las cajas entregadas por la Secretaría.
Lilia Brito Mindiola, rectora del colegio, contó que el 17 de septiembre ella no se encontraba en la institución por cuidado de su salud, por lo cual la entrega se realizó en presencia de la secretaria, quien afirma que la Secretaría de Educación dejó 10 cajas, cada una con 10 cajas dentro, donde debían estar las tablets. Estas se dejaron al interior de una de las oficinas del colegio, sin embargo, en ningún momento tuvo que cargarlas y comprobar su peso.
Pero el 26 de octubre, cuando se encontraban coordinando la entrega de estas herramientas a estudiantes de las tres sedes del colegio, Lilia Brito tomó una de las cajas, y se percató de que estaban muy livianas, cosa que le resultó extraña, por lo que decidieron empezar a abrirlas y comprobar que las tablets estuvieran allí. Fue en ese momento en el cual se dieron cuenta de que las cajas estaban vacías.
En ese momento llamaron a las autoridades pertinentes, por lo que la Policía y la Sijin se hicieron presentes en el plantel educativo. Allí se comprobó que, efectivamente, los dispositivos no estaban. Además, se evidenció que no había indicios de violación a las instalaciones de la institución, pues tanto las puertas, ventanas y techo del colegio se hallaban en su estado normal.
Las directivas de la institución ya realizaron la denuncia por el hecho, y por ahora, están esperando a los avances en la investigación, pues no se sabe qué pasó con las tablets, avaluadas cada una en unos 790.000 pesos, y que estaban destinadas a servir como recurso para los estudiantes.
Por: Vivian Molina.
