Medidas de prevención, monitoreo, aislamiento y atención al incremento de las lluvias por el Fenómeno de la Niña y la temporada de huracanes en la zona Caribe son las peticiones que les hizo la Procuraduría General de la Nación a las autoridades territoriales antes que sea demasiado tarde.
“La Procuradora mostró su preocupación ante las alertas emitidas por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, sobre las probabilidades que aumenten los niveles de los ríos Magdalena, Cauca, Atrato, Baudó y San Juan y los deslizamientos de tierra”, informó la Procuraduría.
Por otro lado, el organismo de control hizo un llamado para que se tomen medidas que conserven y restauren ecosistemas, como los manglares y ciénagas, e identificar oportunamente lugares que puedan servir como centros de refugio por si se presenta una calamidad.
En Cesar la atención se centra en poblaciones ubicadas en la Serranía del Perijá y en la Sierra Nevada y municipios que están a orillas del río Magdalena como Tamalameque, pues en mayo había aumentado en casi dos metros su profundidad y las autoridades estuvieron a punto de desplazar a los habitantes de una vereda.
