Poco a poco los habitantes de barrios aledaños al Colegio CASD de Valledupar, comienzan a sentir algo de tranquilidad, por los trabajos que al interior del plantel educativo se adelantan por parte de la Gobernación del Cesar.
Dichos trabajos de remodelación del colegio, venían causando molestias porque el polvo que se emana desde el interior del plantel, terminaba metiéndose en sus casas.
Esto llevó a residentes en el sector, como Estefany Gámez, Presidenta de la junta de acción comunal de la urbanización Las Flores, y al empresario Joaco Guillén residente en el conjunto Arizona, a elevar su voz de protesta, solicitando que se tomaran medidas para evitar que el polvillo continuara causando las molestias.
“ Aquí estamos como en pandemia, todo el tiempo usando tapabocas” dijo en su momento Guillén, al referirse al molesto polvillo que llegaba hasta su casa y la gente terminaba respirando.
Ante esta situación, Ever Ruiz Caamaño, Rector del colegio CASD, se comprometió ante los micrófonos de este medio de comunicación, a servir de mediador entre la comunidad y el contratista, para que se adelantaran las soluciones.
Es así como el viernes, comenzó la instalación de polisombras alrededor de la obra que se llevan a cabo en el interior del plantel educativo, con los cuales se intenta mitigar el impacto negativo en la comunidad.
Ever Ruiz, dijo que esta es una polisombra que queda por encima de los cinco metros, lo cual permitirá menos traspaso del polvillo.
Indicó el Rector que esta es una primera medida tomada para evitar las molestias en el sector, porque se trabaja en otras como el regar con agua los trabajos para evitar que se levante el polvillo.
