Rostros tristes, preocupados, ansiosos es lo que se encuentra en cada esquina del municipio de Bosconia, luego de que el pasado domingo en horas de la madrugada, los sorprendiera una inundación, que dejó a su paso, daños y desolación.
Entre tantas personas afectadas, está el caso del señor Robín López, quien el pasado viernes fue despedido de una empresa contratista de la firma Yuma. López, es uno de los tantos damnificados junto con su familia.
“Triste, triste, triste, porque uno ha luchado mucho por sus cosas, y de repente se pierden”. Así lo dijo visiblemente compungido el ciudadano Robinson López. Casi al borde del llanto, López contó que como no había agua, su esposa se levantó a llenar los utensilios el domingo en la madrugada, y a los diez minutos observó como el agua comenzaba a entrarse en su residencia.
A Robín López se le unen dos tragedias. Una es haberlo perdido todo, y la otra es el haber quedado sin trabajo, luego de que precisamente el viernes pasado, la empresa contratista donde trabajaba como conductor de volteo, lo había despedido junto a otros compañeros.
“Aquí la contratista, había parado porque no había plata” indicó el ciudadano, al señalar que hasta el mercado del que se había provisto, luego de ser despedido, se lo terminó llevando la corriente.
