El Presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha reactivado el diálogo con las fuerzas de oposición, destacándose por un cambio de actitud más conciliador, especialmente después de distanciarse de ciertas figuras centristas en su gobierno. Retornando a su enfoque inicial de buscar consensos nacionales, Petro se muestra más abierto a colaborar con diferentes sectores políticos para impulsar sus reformas legislativas.

Parte de este nuevo acercamiento incluyó la despedida del Comisionado de Paz, Danilo Rueda, debido a críticas intensas por parte de la oposición sobre su gestión. Rueda, quien enfrentó desafíos inherentes al conflicto armado de larga data en Colombia, perdió el respaldo presidencial, siendo reemplazado por Otty Patiño, un exmilitante del M-19 con experiencia en procesos de paz.

En un notable acto de apertura, Petro se reunió con el expresidente Álvaro Uribe y representantes de su partido, el Centro Democrático, para discutir la controvertida reforma a la salud. A pesar de la improbabilidad de un acuerdo inmediato, el hecho de que ambas partes se sentaran a dialogar tras meses de tensión es significativo. Uribe describió el encuentro como un «debate intenso en buen lenguaje».

El representante a la Cámara por el Centro Democrático, Andrés Forero, reconoció que, aunque el sistema de salud actual muestra avances, hay espacio para mejoras.

El presidente Petro, por su parte, mantuvo el silencio post-reunión, continuando su acercamiento con Uribe, con quien ya ha tenido cinco encuentros. Uribe, enfrentando procesos judiciales, ve en estas reuniones un respiro político. A pesar de sus históricas desconfianzas, ambos líderes muestran un compromiso con la institucionalidad y el diálogo.

Además, durante la reunión se advirtió a Petro sobre posibles obstáculos legislativos y constitucionales que podría enfrentar la reforma a la salud. Petro, por su parte, mostró determinación a seguir presentando la reforma hasta lograr su aprobación, demostrando su compromiso con la misma.

Este acercamiento entre Petro y Uribe ha generado reacciones variadas en redes sociales, donde algunos usuarios han criticado a Uribe por su aparente flexibilidad en las conversaciones con Petro, especialmente en un tema tan polémico como la reforma a la salud.

A pesar de los desafíos y las resistencias que enfrenta, el presidente Petro parece decidido a continuar con su plan de reformas, manteniendo abiertas las puertas al diálogo y la negociación con diferentes sectores políticos.

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