La cosecha de Café de las fincas ubicadas en las veredas del corregimiento Azúcar Buena, jurisdicción del municipio de Valledupar, está en riesgo de perderse por falta de recolectores.
Así lo dio a conocer el líder campesino Evelio López, quien aseguró que ya en varias fincas hay café maduro, listo para la recolección, pero no hay personal disponible para apoyar estas labores.
¿La razón?: la baja en el precio del grano, situación que ha desestimulado a los recolectores a subir a las zonas cafeteras para prestar sus servicios, porque saben que el pago este año será menor que el año anterior. De acuerdo con Evelio López, la caída en el precio del café obliga a los productores a pagar un poco menos el valor de la lata, que el año pasado se pagaba hasta en diez mil pesos.
“La situación de los productores de café se dificulta, porque a raíz de que se bajó el precio, la gente no quiere apoyar con la recolección. Con respecto al precio que vamos a pagar este año, estamos esperando el precio base que nos debe entregar el Comité de Cafeteros, pero debe ser menos que el año anterior por la baja en el precio y que todo se nos ha encarecido: los insumos, la comida, el transporte, todo”, aseguró, el líder cafetero.
Evelio López, hizo un llamado a las personas que anualmente esperan esta temporada para trabajar en la recolección de café, para que suban a Azúcar Buena, en donde hay una gran cosecha en las fincas de las ocho veredas que componen el territorio: “le estamos enviando un mensaje a la gente para que suban porque sí hay trabajo, y además nos apoyarían a los pequeños productores”.
Al problema de la falta de mano de obra para la temporada cafetera se suma también el pésimo estado de las vías de acceso al corregimiento y sus veredas, situación que en repetidas ocasiones han denunciado los líderes campesinos de la zona, quienes aún no reciben respuesta por parte de la Administración Municipal o Departamental, a quienes han solicitado apoyo con maquinaria para, por lo menos, hacer una pequeña intervención a los caminos, toda vez que ya ni los transportadores de la zona quieren subir a prestar servicio, temiendo el deterioro de sus vehículos.
